El
cuervo es una figura literaria muy común tanto en autores clásicos como
contemporáneos, por poner un ejemplo de ambos, tenemos el relato de Edgar Allan
Poe, El Cuervo, y luego tenemos la figura tan omnipresente de los cuervos en la
saga de Canción de Hielo y Fuego de George Martin.
Es
un animal que existe en casi todos los continentes menos en la Antártica y son
unos animales de lo más curiosos, por lo que no es de extrañar la cantidad de
mitología que se ha creado a su alrededor. Los cuervos pueden distinguir una
cara humana de entre una multitud, además prefieren vivir cerca de las ciudades
que en el campo.
Son
animales empáticos, pudiendo reconciliarse o consolar a otros congéneres.
Tienen comportamientos con los que ayudan, consuelan a miembros de la bandada
que han sufrido un episodio traumático, de cualquier clase. Por lo tanto ya no
es solo la empatía sino el ofrecer consuelo psicológico, algo solo visto hasta
ahora en los mamíferos. Esto crea lazos más o menos fuertes entre ellos depende
de si ese cuervo es con quien suelen pelear
o el cuervo con el que suelen empatizar. Los cuervos por lo tanto viven
en grandes familias. Se ha descubierto que hay cuervos que son más populares o
conocidos entre su clan que otros ya sea por actitudes dominantes o mediante el
engaño. Algunos de estos animales fingen acciones para robar la comida de sus
congéneres.
Otra
característica sumamente interesante es que crean sus propias herramientas, no
solo resuelven puzles si no que aprovechan objetos del entorno para resolverlo.
Además estos animales tienen algo muy sorprendente: tradiciones y algo así como
respeto hacia los muertos.
Por
lo tanto no es de extrañar que estos animales surjan en el imaginario colectivo
de novelistas, que los plasman con sus diferentes metáforas, pero siempre como
un animal inteligente y a veces retorcido. Ya aparece en la Biblia donde Noe
suelta al cuervo para ver si las aguas han bajado, y este no vuelve y en otro
relato le llevan alimento a Elías. En la cultura nórdica se usaba el símbolo
del cuervo en las velas. Ragnar Lodbrok usaba un estandarte con una bandera y
un cuervo bordado y la leyenda dice que si la bandera ondeaba al viento,
Lodbrok ganaría la batalla. En la mitología, Hugin y Munin son los cuervos que
se apoyan en los hombros de Odín y le informan de todo lo que ven y oyen, son
sus mensajeros. Hugin era la reflexión así como Munin era la memoria.
Curiosamente en Poniente, el universo de Canción de Hielo y Fuego, no vemos a
las típicas palomas mensajes, sino que los cuervos son los mensajeros, como si
de una referencia a esta cultura nórdica se tratara.
Hugin y Munin junto a Odín. |
Shakespeare
en su obra Otelo y Macbeth menciona al cuervo abundantemente. Pero no solo en
literatura de drama o de fantasía, donde los mitos están al pie del cañón,
Asimov da presencia notoria al cuervo en su saga La fundación. Podríamos hacer
una larga lista de autores conocidos y la aparición de cuervos en sus obras (El
hobbit de Tolkien, Jonathan Strange & Mr Norrell de Susanna Clarke, en un
relato de Dickens titulado Barnabé Rudge,…) pero para ilustrar más gráficamente
la curiosidad que siempre ha suscitado al imaginario colectivo de la humanidad,
os dejo con algunos vídeos y documentales muy interesantes.
Trailer de un gran documental
Unos cuervos divirtiéndose con la nieve, fijaos en como la prueban, se revuelcan y se regocijan en su esponjosidad, alucinante.
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