Mi
relación con Emilio Bueso en distancias cortas había sido agridulce, más agrio
que dulce. Y es que me declaro un gran aficionado a sus novelas, pero no así
con sus relatos. Ahora intenta dormir
(Valdemar, 2015) es sorprendente. Y además ha conseguido que me reconcilie con
el autor en su formato más corto. Este tomo editado por Valdemar en tapa dura y
formato reducido al precio de 12€ (casi regalado), incluye cuentos y relatos
recuperados de otras antologías además de inéditos, formando así una amalgama
narrativa que incita a un viaje estilístico y temático por las diferentes
facetas de Bueso.
Emilio
Bueso es un autor cuyo estilo es identificable pero a su vez nunca es el mismo.
Con algunos puntos en común pero siempre sorprendiendo. Creo que como
valoración global, los textos de Bueso suelen cojear por el argumento, pero en
cambio la parte estilística es excelente. Pocas veces he disfrutado tanto un
texto como en Diástole (por poner un
ejemplo). Esta cojera argumental se acrecentaba en los textos cortos que leí de
Emilio (Terra Nova, Mañana Todavía).
Sin embargo, en Ahora intenta dormir
ha sido sorprendente ver que la gran mayoría de relatos son notables, sin
apenas “peros”. Emilio Bueso es un autor que arriesga con cada texto, con cada
apuesta, y la consecuencia de esto es errar más que acertar. Bueso es un autor
que no va a lo seguro, y eso, debo reconocer, me resulta atractivo.
Ahora intenta dormir, es una antología repleta de
relatos interesantes y terroríficos. Relatos que en pocos párrafos consiguen
una inmersión directa del lector. Porque son relatos que contienen pesadillas,
miedos profundos, escenas dantescas y sacadas del infierno de El Bosco. La
analogía de Emilio Bueso y Zdzisław Beksiński (el ilustrador de la portada) es
notable, ambos ven un mundo que, por suerte, no todos sabemos que existe, o por
lo menos no podemos ver. Pintor y escritor dibujan y escriben sobre el mundo de
las pesadillas, sobre la parte oscura de nuestra mente. Sobre lo retorcido y lo
oscuro.
Los
relatos de Bueso no dan miedo persé. Sus cuentos muestran el terror en
palabras, perfilan imágenes perturbadoras y nuestra imaginación hace el resto. O quizá nuestra memoria. No me imagino a Beksiński tratando de asustar a su
público con sus pinturas. Creo que ambos (si me permitís seguir con la
analogía), buscan desprenderse de esas imágenes que los atormentan en sueños.
Como si ponerlas sobre el papel y ofrecerlas al lector fuera una forma de
librarse de ellas. Aunque eso sólo signifique dejar paso a nuevas pesadillas.
Esta
antología está repleta de obsesiones, por ello Emilio Bueso escribe una pequeña
introducción a cada relato, presentando el texto, explicando la razón del
mismo. Esto añade un efecto metaliterario interesante, pues hace estos cuentos
de terror todavía más palpables. ¿Nunca os habéis preguntado cómo se gestan las
pesadillas? Emilio Bueso nos lleva de la mano por los desolados campos de la
imaginación más perversa y retorcida en Ahora
intenta dormir.
Muy interesante, si ya tenía ganas de leerlo antes, ahora más. Yo leí Diástole, y tienes razón, no me gustó mucho la historia, pero el estilo de Bueso me tenía igualmente fascinada. Y me gusta la comparación con Beksinski. GG
ResponderEliminarMe llamó muchísimo la atención desde que lo vi hace unos meses. Sin embargo me echaba para atrás las opiniones tan dispares sobre el autor. Muy pendiente lo tengo ya.
ResponderEliminarBesos.
Hola :) Nunca he leído nada de Bueso, y como no paráis de hablar de él por los fueros twitteros pues, ya tengo más que en listado este volumen, que además como dices, son 12€ de nada por lo que promete una lectura maravillosa, de esas que se meten en tu cabeza en forma de imágenes espeluznantes que espantarían las peores pesadillas. Un abrazo^^
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