Creo que es
interesante hacer una reflexión de un año que pasa, poder cerrar la puerta y
afrontar el siguiente. Además me gusta leer este tipo de entradas en otros
blogs o entablar conversaciones sobre este tema que se suelen alargar y pensé
en ponerme a escribir que al fin y al cabo es como mejor me expreso (la trampa
de poder rectificar lo que dices una vez escrito).
2014 empezó
siendo un año incierto, el blog avanzaba pero yo tenía la mirada y las ganas
puestas en otras cosas. En enero se inauguró un proyecto llamado Fantàstik que
a los pocos meses se estrelló. Este proyecto me hizo especial ilusión y me
desanimó mucho que acabara en nada (todavía sigue ahí) por eso relanzarlo es
uno de mis propósitos este año. A
principios de febrero murió mi perro, a quien echo de menos cada día. Es ver a
cualquier perro ya sea por la calle o en algún video y una melancolía enorme se
apodera de mí. Como consecuencia Agata y yo preparamos un viaje por toda la
provincia de Girona, para cambiar de aires y despejarnos y donde grabé una “pequeña”
reseña excursionista.
Además para aquel entonces también me había incorporado
al equipo de El Fantascópio (el cual ahora mismo también está parado).
Incorporación que me hizo una ilusión tremenda. Por lo que el blog a principios
de 2014 tenía una media de 7 entradas al mes. A principios de febrero conseguí
un trabajo adicional a mi labor en el 112 que aunque prefiero no desvelar, era
como un sueño cumplido. O parte de un sueño cumplido. Trabajo que sigo
realizando desde Dinamarca y que me tiene totalmente entregado.
En marzo
creamos el The Spoiler Club a raíz de una entrevista fallida que Miquel y yo le
hicimos Jesús Cañadas. El proyecto sigue
aguantando y creciendo hasta ahora. A finales
de marzo tuvo la Inauguración de la #NuevaGigamesh y donde me encontré con
multitud de personas a quien aprecio enormemente. Fue un par de días muy
intensos y que engancharon con la Calçotada Friki, evento al que espero repetir
este año. Y abril empezó siendo un mes fuerte. Mis visitas a Barcelona eran muy
frecuentes.
Julio fue un
mes decisivo. Mi vida dio un cambio de 180ºC y todo se puso patas arriba. Era
algo que me esperaba y que venía creciendo como una enorme bola de nieve desde
hacía unos meses, pero el calor y los vasos colmados de gotas terminaron por
derramar el estoico aguante de uno. La situación la comenté en un post
bastante largo que muchos de vosotros comentasteis (algo que me hizo mucha
ilusión).
Julio fue el
mes del Celsius232 y agosto fue el mes en que me vine a vivir a Copenhague, y
aquí sigo. Creo que ha sido una de las decisiones de las que más orgulloso me
siento y aunque cuesta avanzar, uno va tirando. Venir a vivir fuera me ha
ayudado a ver las cosas en perspectiva, a tener claras mis prioridades, y sobre
todo a calmar mi espíritu* (*introduzca símil que se ajuste a las necesidades
del lector). Estar alejado de todo lo que me estaba empujando a la monotonía me
hizo comprender que a veces basta con tomar esa decisión que tanto nos asusta
para ver que no es tan complicado ver un cambio en nuestras vidas. No estoy
diciendo que yo tenga la vida solucionada, reconozco que las estoy pasando
canutas en el norte, pero con una sonrisa en mi cara. Cuando vivía en Cambrils
tenía dos trabajos y no tenía que pagar un alquiler, sin embargo me sentía en
parte vacío. Ahora como buen muerto de hambre, sé que hice lo correcto.
En septiembre
tomé la decisión de impulsar al blog, el cual estaba bastante abandonado, y
darle la vida que se merece (ya que me ha proporcionado una cantidad incontable
de alegrías, amistades y nuevos horizontes). Y desde ahí hasta ahora, sumando
proyectos y nuevas metas. 2014 ha sido un año de despegue, que empezó negro y
oscuro y ha terminado… Bueno, en Dinamarca es bastante negro y oscuro, pero
sarna con gusto no pica. Tengo curiosidad por ver qué depara el nuevo año.
En cuanto a lecturas, Goodreads dice que he leído 140 libros, de los cuales 10 han sido libros de ensayo, 24 han sido novelas gráficas o manga y el resto novelas ya sean de ficción o no, por lo que he leído un total de 106 novelas. Aquí tenéis el primer post sobre las mejores lecturas de 2014 y aquí el segundo post. Además he colaborado con diferentes editoriales y me he incoporado a NetGalley. Espero superar este tope este nuevo año.
No quiero
cerrar este post sin agradecer a TODOS los que pasáis por el blog y me leéis, a
los que me comentáis en alguna entrada, a los que me comentáis por redes
sociales, al Fantascópio, a todos con los que he compartido conversaciones en
eventos como Celsius, Mircon, Calçotada Friki o en evento de la Gigamesh. Pero
sobre todo quiero agradecer a varias personas que este año me han dado una
torta en la cara y me han abierto los ojos de una u otra forma y me han ayudado
cuando yo más lo he necesitado sin apenas conocerme. JC, MC, RR y AH, AT y SV
(ya sabéis quiénes sois). Pero sobre todo quiero dedicar este post a Àgata, sin
quien no habría llegado a donde estoy. Gracias por estar a mi lado siempre. T’estimo.
Te deseo un 2015 lleno de grandes aventuras llevadas a buen puerto! :D
ResponderEliminarMe das un poco de envidia con lo de Copenhague. Antes de montar la librería, tenía pensado irme a vivir a Reykjavik pero al final lo dejé para algún otro momento de mi vida. Pero la verdad es que me habría encantado. Así que te deseo mucha suerte por las tierras heladas :D
ResponderEliminarPor otro lado, seguro que este 2015 será aún mejor, al menos en cuanto a lecturas y en cuanto al blog ^^
¡Un beso!
Mi año ha sido bastante parecido aunque menos productivo jajaja, te admiro. Eso sí, también he dado el paso de salir del país, salir de mi (insoportable) casa paterna e irme a UK, y hasta he dejado dos trabajos XD
ResponderEliminarConozco tu blog desde hace poquito (de un poco antes del Celsius creo) pero la verdad es que me gustan muchísimo tus entradas. Los blogs que habláis más de Fantasía y SCIFI que de YA no sois muchos y siempre me alegráis los días.
Así que feliz 2015 y por favor por favor que te dure la ilusión con el blog :p